Sentados en el columpio de la vida,
en sus subidas y bajadas nos encontramos
en el paisaje.
Luce de todos colores, aunque el gris
reyne en el; eso no impide subir.
Hacia lo lejos se puede ver el arcoiris lleno
de colores vibrantes, que en el viaje
alcanzaremos.
Quitaremos la piedra en el zapato,
sentiremos el camino con pies descalzos,
abriremos sentidos dormidos con sue~nos
magicos.
Al otro lado, el verde nos sonrie con su regalo
de oxigeno, las flores acarician en su aroma;
mas el viento nos habla al oido y nos dice que no
perdamos sentido de continuar en el horizonte
hasta el final de los dias.